El fracaso de los independientes
¬ Augusto Corro martes 27, Mar 2018Punto por punto
Augusto Corro
La imagen de los candidatos presidenciales independientes quedó muy abollada tras ponerse en evidencia su conducta tramposa para aparecer en la boleta electoral.
Miles de firmas e identificaciones falsificadas pusieron fin a la esperanza de acabar con la partidocracia en México.
Margarita Zavala de Calderón, Jaime Rodríguez (a) “El Bronco”; y Armando Ríos Piter (a) “El Jaguar”, los principales competidores en busca de la candidatura presidencial resultaron un fiasco.
De los tres mencionados, solo la señora de Calderón fue aceptada por las autoridades electorales para participar en la contienda presidencial.
Jaime Rodríguez y Ríos Piter fueron eliminados. Su conducta tramposa no les permitió seguir adelante. Margarita Zavala de Calderón estaba en la misma condición de irregularidad que los otros dos aspirantes, pero el rasero parejo no funcionó.
Ella libro las sanciones como mejor pudo. Al fin y al cabo estamos en México donde todo ocurre, hasta lo más insólito, siempre que se trate de influencias de todo tipo.
Más de un mexicano harto de los partidos políticos supuso que sería deseable que el 1 de julio aparecieran nombres nuevos de candidatos independientes en la boleta electoral. De aspirantes presidenciables ajenos a la política que tiene a México ahogado en la corrupción, la violencia y la impunidad.
Pero no se pudo en esta ocasión. Desde inicio de la justa electoral, los competidores ya traían un pasado partidista imposible de sacudirse.
La señora Calderón fue militante, casi toda su vida, del Partido Acción Nacional (PAN). Después, acompañó a su marido Felipe Calderón, que hizo el ridículo como Presidente de México en su guerra fallida contra la delincuencia organizada.
De ninguna manera se pudo decir que la candidata presidencial luciera una mente independiente con una militancia partidista en un partido conservador, que ahora camina sin rumbo.
Otra posible esperanza la representaba el gobernador con licencia de Nuevo León, Jaime Rodríguez, quien no solamente le dio vuelo a la falsificación de firmas y documentos, sino que también se fue sobre el dinero de contribuyentes para su campaña política.
Igual que doña Margarita, Jaime Rodríguez militó por más de 20 años en el Partido Revolucionario Institucional (PRI). Tiempo suficientes para aprender las mañas y las transas de los priístas.
Y el caso de Ríos Piter va por el mismo sendero de irregularidades. Exmilitante perredista se lució en la aplicación de firmas falsificadas. De nada le valió. Las autoridades descubrieron los engaños y terminaron con la farsa.
El sueño de un candidato presidencial independiente se esfumó. La posibilidad de terminar con la partidocracia dañina será para otra ocasión. Por ahora, nos toca aceptar que la idea de un aspirante presidencial resultó un verdadero fracaso.
Doña Margarita Zavala no se podrá manejar como aspirante presidencial independiente. Su pasado panista y su parentesco con el impresentable ex presidente de México, Felipe Calderón, le tienen asegurada la derrota.
El futuro del PAN
A las elecciones presidenciales llegarán parchados los principales partidos políticos.
No fueron tomadas en cuenta las ideologías, ni los principios que en más de un caso eran opuestos.Derecha, izquierda, centro, corrientes políticas del pasado quedaron unidas con un solo fin: la adquisición de votos.
Poco importó mezclar el agua con el aceite como ocurrió con Acción Nacional y el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
En esa alianza, por cierto, si los partidos que la integran no alcanzan la victoria, el PAN podría resultar el más afectado.
Para alcanzar la candidatura presidencial, Ricardo Anaya sometió a los panistas a una lucha interna que aceleró el divisionismo. Personajes principales del blanquiazul abandonaron el partido. Se marcó la diferencia entre “calderonistas” y “anayistas”.
De no ganar Anaya la fractura se hará mayúscula y el PAN podría quedar en las mismas condiciones que el PRD: en vías de desaparición. Si resulta perdedor, los panistas no le perdonarán a su líder que por sus ambiciones desmedidas de poder, el partido sufra las consecuencias del divisionismo.
Aún hay que esperar en qué condiciones llega Acción Nacional al 1 de julio, fecha en que se conocerá cuál fue el apoyo real de las bases panistas a su candidato.
Porque se debe recordar que Margarita Zavala se convirtió en el otro polo de atracción del voto panista. Los militantes de Acción Nacional ven en la señora de Calderón que irá sola en la candidatura presidencial como independiente, sin la carga pesada y negativa de los perredistas, aliados con el PAN y el Movimiento Ciudadano, en la coalición Por México al Frente.